viernes, 20 de febrero de 2009

Los medios de prensa y su doble moral

Editorial Diario Colatino
Reconocidos medios de información escrita de derecha, coyunturalmente instrumentos de propaganda del partido ARENA, titularon en primera plana, en su edición de ayer, un supuesto pedido de la Embajada de los Estados Unidos en El Salvador, de no utilizar en la campaña la imagen del Presidente Barack Obama.
En efecto, en la campaña del FMLN, presentan en algunos «spots», a salvadoreños residentes en Estados Unidos, refiriéndose a la campaña sucia que en la gran potencia del norte hubo contra Obama, durante el proceso electoral, al igual que la derecha salvadoreña la hace contra Mauricio Funes y el FMLN.
Por supuesto que los «spots» de la propaganda electoral del FMLN, no dañan, en forma alguna, al Presidente Obama, ni mucho menos al pueblo estadounidense, por lo que, sería innecesaria, en futuro cercano, un reclamo diplomático de otro tipo.
Los mismos periódicos dicen que “no obstante, el funcionario aclaró que no pedirán expresamente al FMLN que retire del aire los anuncios televisivos”. Esto es lógico, pues, como decimos arriba, la campaña no es negativa, ni mucho menos denigrante.
En las notas periodísticas, dejan alguna preocupación de la Embajada de que, el uso de la imagen de Obama, “puede dar la impresión de que hay un respaldo (de EE.UU.) a un partido político”.
Es decir, a la derecha y a sus medios de información le preocupan que un partido político, en este caso el partido opositor, con posibilidades de triunfo, utilice la imagen de un presidente extranjero en la campaña.
Desgraciadamente, esa preocupación no es tal, cuando se ataque figuras presidenciales de Sur América, como la del Presidente Hugo Chávez, Presidente Rafael Correa o la del Presidente Evo Morales.
Las protestas que el señor Encargado de Negocios de Venezuela en El Salvador, Don Wladimir Ruiz Tirado, no han sido ni motivos de noticias para estos medios, ni mucho menos para titular de primera plana.
Mientras los «spots» del Frente han utilizado la imagen del Presidente Obama, de forma positiva, ARENA, Fuerza Solidaria y los medios de derecha lo hacen en forma negativa, malcriada y ofensiva. Sin lugar a dudas, estos defensores de la libertad de expresión le apuestan a la doble moral.

miércoles, 11 de febrero de 2009

El Salvador: A pesar de todo

Tomado de semanario El Independiente
José Mario Zavaleta
Quienes vivimos en El Salvador, y tenemos la suficiente edad para recordar los tiempos de la detestable dictadura militar y los de “Conciliación” – periodo en que gobernó el Partido de Conciliación Nacional (PCN), para quienes no lo han vivido- podemos hablar con propiedad sobre esa tiranía que se impuso a costa de la represión mas brutal y los escandalosos fraudes.
No pueden sus autores hacernos callar sobre lo que vivíamos en tiempos de campaña electoral y las propias elecciones. Como se trataba al oponente, a sus dirigentes, a sus militantes, todos bajo amenaza, incluso de muerte; en nuestras narices violentaban las reglas, echaban a los vigilantes partidarios antes del recuento de votos so pena de ser vapuleados o asesinados, llenaban a su favor y antojo las urnas electorales en los propios centros de sufragio, o se las llevaban a los cuarteles donde los coroneles apoyaban el “trabajo”.
Muchas lágrimas, decepciones y rabia hubo de expresar esa juventud y demás generaciones que aspirábamos a un país mejor y diferente, el que seguimos soñando en justicia social, salud y educación para todos. Luego llegó el golpe de estado del 79 y después la guerra, la muerte y sus escuadrones, la farsa de la democracia en medio del conflicto de baja intensidad y la alianza de civiles y militares contrainsurgentes; ahí hubo elecciones también, gobiernos con perennes estados de sitio y ley marcial. Por ello con la firma de los Acuerdos de Paz confiamos sería la refundación del estado salvadoreño; pero luego más de lo mismo, que se ha entronizado mientras nos alejamos de la verificación de la ONU de inicios de los noventa; mismo régimen, mismo partido, que para perpetuarse utiliza las famélicas instituciones que le sirven de instrumento a su antojo. La justicia es una farsa para el que no tiene nada o no es privilegiado; la seguridad es una campaña publicitaria contra la delincuencia que es atizada de vez en cuando para asustar a los electores. La Corte Suprema de Justicia se parece cada día más a la calificación que enunció el casi olvidado luchador de los años duros del militarismo, el abogado Luis Alonso Posada, cuando aseguraba a todos lo vientos: “es la prostituta del estado”;la Fiscalía un baluarte de la casa gobernante, la Corte de Cuentas más ciega y mañosa, reducto de las manitas.
Y las elecciones contemporáneas convertidas y publicadas como fiestas cívicas, pero atoradas en el desorden ordenado por interesados en que nos sintamos incómodos y deseosos de salir huyendo o no ir a sufragar, amontonamientos humanos para desesperar al más paciente, centros de votación nada comparables a los aseados, ordenados y estéticos centros comerciales que promueven los mismos que rigen el proceso electoral, votantes obligados al hacinamiento y la inmundicia, transportados como si fueran semovientes en camiones, obligados a grandes desplazamientos, o desplazados a distancia para ganar una plaza. En fin realmente me da vergüenza que mis hijos vean esta democracia y sus procesos electorales convertidos en inmorales batallas, como si no hubiera sido suficiente con las experiencias de los sesenta y setenta. ¿Realmente se sentirán orgullosos los organizadores de esta bazofia? ¿Acaso no sabrán que otros países hermanos nos han superado en orden y eficiencia? En las elecciones de Guatemala y Ecuador, para ejemplo, a las cuatro horas de cerradas las elecciones sus pueblos ya sabían quien era su nuevo presidente. Y lo supieron entre otras formas como quien escribe, a la distancia, porque sus tribunales Electorales cuentan con excelentes sitios de internet accesibles para millones y desde donde fueron eficientemente enterados. Acá se jactan de modernidad y excelencia de las comunicaciones, y la autoridad electoral apenas tiene una página web que nadie puede abrir, donde le es negada la información a la población, y se conforman con esperar el día siguiente que haya datos preliminares que nunca se concluyen. Realmente una vergüenza, pero más que todo, una chambonada bien lograda, porque así les conviene; como a los fiscales desaparecer de los centros de votación mientras los pícaros hacen de la suya, algo como dejar hacer y mirar a otro lado.
¿Qué necesidad tiene un partido poderoso, con recursos sin límite, miles de militantes, medios a su disposición, y el gobierno a su amparo, para necesitar andar acarreando a los campesinos y personas humildes, muchos de ellos analfabetas, que por su responsabilidad y designio les imponen ignorancia, quienes ni su nombre completo conocen, ni cuantos años tienen, mucho menos en que lugar les corresponde ejercer el voto? Los necesitan así para utilizarlos a su antojo.
¿Acaso es necesario para nuestra cacareada democracia y el proceso electoral bendecido por la OEA, utilizar el enorme aparato del partido para inducir el voto en locales computados y apantallantes instalados en la periferia de los centros de voto donde enlistan y corrompen a los ciudadanos traídos del campo a la ciudad, hacer propaganda descarada el propio día de las elecciones ante la incompetencia o complicidad de la autoridad electoral, pagarle cinco, diez o veinte dólares a los votantes para que voten por su partido, darles vales de supermercado, el almuerzo o un refresco, para aprovecharse de la pinche necesidad de quienes menos disfrutan del desarrollo y la riqueza que su modelo económico enuncia? Sinceramente repugnante y nauseabundo pensar que ese es el futuro al que quieren obligarnos. No es posible que ese sea su ideal para seguir viviendo a lo grande y con sus grandes ganancias. No entiendo que crean que no conocemos otras realidades y que lo nuestro no es lo mejor, aunque traten de decir que son unos bárbaros de la eficiencia. Y para colmo, critican a Nicaragua y a Venezuela; pero acá nos basta con lo que vemos, como al presidente del TSE que pareciera que su propósito es hacerse cada vez más detestable; prepotente, creyéndose el listo, el que será eterno e impune de por vida, el virtuoso ejecutor del Plan Maestro, antípoda de cualquier juez o magistrado decente y a quien no le causa la mínima vergüenza mostrarse parcial a su partido.
En fin, aunque digan lo contrario la prensa, el de hoy, el mundo, las televisoras, los “analistas sabios”, la OEA, la ONU, la Santa Sede y todas las representaciones diplomáticas juntas, el procónsul imperial, el presidente, quien sea, esto no para sentirnos orgullosos. Es una trampa favorable para los que quieren perpetuarse, cargando una gran viga, mientras señalan y se escandalizan de la basura de los otros que no comparten su ideología. Y lo real es que es el juego y las reglas ellos los han diseñado, en fragor del conflicto armado, desde que impusieron la constitución del 83, y los miles de códigos y reglamentos existentes y modificados; y es en esa cancha que el pueblo alrededor de un partido hoy se ha resuelto a dar la batalla disputada en condiciones desiguales.
Porque la población decente, la mayoría no acepta el fraude, el desorden, los retrasos, las trampas, lo oscuro y a los pícaros. Pero ahí toca hacerlo mientras no sea cambiado de tajo, en esas condiciones debe de ser; y a pesar de todo ello, hoy se vence al oponente cruel, y se le coloca contra la pared.
Precisamente las elecciones de este 18 de enero son la muestra, todo lo que se ha escrito ha sucedido, no son inventos, y seguramente se me han escapado muchos detalles más; y aun así, se les ha arrebatado la tranquilidad que sentían para usufructuar el poder, transformada en pavor por perderlo. Aún negándole el voto a los salvadoreños en el exterior, y permitiendo desvergonzadamente que hondureños, guatemaltecos y nicaragüenses voten por ellos, se les ha ganado de manera clara, a pesar que no votamos todos, a penas superamos el cincuenta por ciento. Ese cerca de millón de votos logrados por la izquierda son limpios, decentes, conseguidos en buena lid; mientras, la derecha de arena ha necesitado de triquiñuelas para sus resultados. Es de esperarse que para la contienda del 15 de marzo se incremente el caudal de sufragios que debiera expresarse con una mayor diferencia con relación al oficialismo. Y como lo saben, tratan de descalificar todas las encuestas de opinión y las encuestadoras que no les favorecen, por los hechos de San Salvador; pero ahí estamos claros que han intervenido más cosas que el fallo de una encuesta. La realidad es que todas han acertado, se han cumplido las que anunciaban que el FMLN tendrían mas votos y mas diputados, que se les arrebataría Santa Ana, Usulutan, Zacatecoluca, entre otras; que se mantendrían las ciudades del gran San Salvador; que Salgado ganaría en San Miguel y que Arena mantendría las cabeceras Paracentrales, Ahuachapan y Sonsonate. Por ello, lo de la capital es resultado de una suma de factores que luego habrá que analizarse.
Mientras, las tendencias que el pueblo ha creado alrededor de Mauricio Funes no tienen por que reducirse, al contrario, si tomamos en cuenta que en las actuales circunstancias se les ha vencido, seguro es que igualmente se habría ganado con contundencia y en primera vuelta la presidencia de haberse realizado las elecciones este mismo 18 de enero. Como se sabe, las separaron para provocar la dispersión del voto de la izquierda y para Mauricio Funes, pero por la conducta perversa y cínica demostrada por el oficialismo para alcanzar su pírrica victoria, la población se ha sensibilizado mas para reconocer en ellos su verdadera esencia antidemocrática, como siempre lo han sido.

lunes, 2 de febrero de 2009

La juventud se aferra a la esperanza por el cambio.


Juventud es sinónimo de energía, vigor, entusiasmo desbordante, dinamismo y creatividad, hoy volcadas estas cualidades en la esperanza por el cambio, esto es lo que muestra el sector de jóvenes del Movimiento Amigos de Mauricio. Este domingo 1 de febrero los jóvenes recorrieron los municipios de San Lorenzo, San Esteban Catarina, Tepetitàn, Apastepeque, San Sebastián y Santo Domingo, quienes al son de la batucada bailaban y coreaban consignas de fe, de esperanza, su entusiasmo contagiaba a chicos y adultos quienes espontáneamente se unían abrazando la causa por llevar a la Presidencia de la Republica a Mauricio Funes.
Y es que esto no es una esperanza caprichosa o antojadiza, es una esperanza cultivada por muchos años de lucha del pueblo salvadoreño, desde nuestros ancestros Anastasio Aquino, Farabundo Martí, Feliciano Ama, Francisco Sanchez, Enrique Alvarez Cordova, Oscar Arnulfo Romero, Rutilio Grande, Shafick Handal y muchos miles mas que con su entrega por la conquista de espacios de libertad han ido forjando las condiciones para construir un mejor El Salvador.
Ha llegado el momento de dar la batalla final por alcanzar el control de ejecutivo y desde allí impulsar los cambios estructurales que urgentemente este país necesita. Para que nuestros jóvenes tengan la oportunidad de estudiar en una Universidad y no sean arrojados al exterior en la búsqueda del sueño americano dejando muerte y desintegración familiar. Es el momento de pensar en nuestros padres y abuelos que entregaron sus vidas por este terruño y ahora sobreviven con pensiones miserables y muchos de ellos nunca han contado con esa mínima pensión y siguen trabajando con sacrificio para ganarse el sustento diario.

Es tiempo de pensar en nuestros agricultores que siguen labrando la tierra para producir los alimentos necesarios para toda la población, a pesar de que no cuentan con el apoyo del estado, y son victimas de comerciantes inescrupulosos al comprar abonos, pesticidas y otros insumos agrícolas a precios elevados, por lo que a la hora de vender su cosecha no alcanzan a cubrir sus costos de producción. Es tiempo de pensar en los salvadoreños menos afortunados de este país, los mas pobres, aquellos que llegan a los hospitales nacionales en búsqueda de ayuda a sus males físicos y no encuentran mas que desilusión y frustración.
Este pueblo esta sumido en una grave crisis económica y social; y los que han gobernado los últimos 20 años pretenden engañarnos una vez mas; no lo permitamos, iniciemos desde ya la construcción de un nuevo El Salvador, desde el lugar donde nos encontremos, tenemos que dar nuestro aporte individual por el cambio, así como estos jóvenes lo hacen imprimiendo entusiasmo, también cada uno de nosotros podemos contribuir sacando del error a muchas personas que se dejan engañar y atemorizar por la maquinaria de los medios de comunicación.
El Salvador merece una oportunidad de vivir mejor, seamos parte de la esperanza y del cambio.